Descubre la importancia de los valores altos en el análisis de sangre de bebés en la biodescodificación
La Biodescodificación es un método científico que ayuda a comprender e interpretar los problemas que surgen en el campo de la salud y la enfermedad. Está orientado a comprender las raíces emocionales, psicológicas y espirituales de los síntomas que conducen a la presencia de ciertas enfermedades en el cuerpo. Una herramienta importante en esta práctica es el análisis de sangre.
Uno de los procedimientos analíticos más frecuentes en el contexto de la biodescodificación es el análisis de la sangre de recién nacidos y bebés lactantes. A este respecto, es importante tener en cuenta que la interpretación de los resultados debe realizarse en el contexto de la historia individual y familiar del paciente, así como de los aspectos emocionales presentes cuando se realizó la prueba.
Uno de los elementos que pueden condicionar el análisis es la presencia de valores elevados en los resultados de la prueba. Éstos pueden ser un indicador de algún problema de salud en el bebé, pero también de una evolución de algún problema emocional o psicológico en el contexto familiar que pueda ser consanguíneo o inmediato.
La interpretación de los resultados
Es importante aclarar que los valores elevados en los resultados del análisis de sangre no siempre son un signo de patología. De hecho, muchos niños sanos tienen parámetros hematológicos ligeramente elevados que, por sí mismos, no son indicativos de una enfermedad. Estos resultados también pueden ser consecuencia de que la prueba se realizó en un entorno muy emocional y, en estos casos, la lectura de los resultados debe retrasarse.
En el contexto de la biodecodificación, el análisis de los resultados debe enmarcarse dentro de la historia del niño y el contexto familiar, teniendo en cuenta elementos como el entorno gestacional y postgestacional, el impacto emocional en la familia, las enfermedades o problemas de salud actuales o pasados, así como, en su caso, los factores genéticos.
En principio, un valor alto puede estar vinculado a una acentuación de traumas o conmociones interfamiliares ocurridos durante el embarazo, el parto y los primeros estadios postnatales. Esto puede marcar los procesos de percepción y modulación del niño desde un punto de vista psicológico y emocional, dando lugar a posibles problemas de salud en el futuro.
Por ejemplo, unos valores altos en la presencia de enzimas hepáticas pueden ser indicativos de la acción de traumas o conflictos interfamiliares, que no se permitieron elaborar en las generaciones pasadas. Por el contrario, unos niveles elevados de leucocitos pueden estar asociados al miedo y la rabia, como restos de las emociones de los antepasados del niño.
Valores altos en la sangre de los bebés
Al considerar la aparición de valores altos en el análisis de sangre de un bebé, es importante tener en cuenta que el niño es extremadamente sensible a la atmósfera de su entorno inmediato. Por ello, es de gran importancia tener en cuenta todos aquellos elementos a los que el bebé estuvo expuesto durante la experiencia gestacional y perinatal previa, así como el momento actual de su vida.
Uno de los aspectos clave en el análisis de los resultados se refiere al posible efecto de los traumas ancestrales en el bebé. El trauma ancestral, en el marco de la biodescodificación, se refiere a aquellos traumas que ocurrieron en el entorno familiar y que actuaron como desencadenantes emocionales y psicológicos, despertando miedos y conflictos de gran proporción y que, en algún momento, dañaron la integridad de la familia. Estos traumas se transmiten de generación en generación, dejando un vacío emocional que, si no se actúa, afectará a las generaciones futuras.
En este contexto, un nivel elevado de VCM (volumen corpuscular medio) puede indicar la inminencia de un trauma en la familia del niño. Un alto nivel de VCM es indicativo de un retraso en el proceso de diferenciación de los glóbulos blancos, y puede estar vinculado a la incapacidad de la familia para expresar sentimientos y emociones. Asimismo, unos niveles elevados de HCM (hemoglobina corpuscular media) y de CHCM (concentración de hemoglobina corpuscular media) pueden ser un indicio de conflictos emocionales.
Equilibrando los procesos emocionales y psicológicos del bebé
Una vez obtenidos los resultados del análisis de sangre, y analizados todos los factores que pudieron influir en su lectura, es importante proceder al desarrollo de un plan terapéutico personalizado con el fin de ayudar al bebé a equilibrar sus procesos emocionales y psicológicos.
El plan debe contemplar las necesidades del niño y la familia, y tener en cuenta los recursos y límites de éstos. Puede incluir psicoterapia individual y familiar, conversaciones terapéuticas con el bebé comunicándose con sus necesidades y emociones, así como el intento de expresión con palabras, dibujos, música y contacto con la naturaleza.
Sin embargo, es importante subrayar que deben evitarse los tratamientos oportunistas destinados a la mera reducción de los valores altos detectados. Si los niveles elevados son consecuencia de conflictos emocionales y psicológicos, cualquier intervención farmacológica no tendría el efecto deseado en el equilibrio emocional y psicológico del bebé.
Conclusión
La lectura e interpretación de los resultados de las pruebas de sangre de recién nacidos y lactantes debe realizarse en el contexto de la biodescodificación, es decir, teniendo en cuenta los elementos emocionales, psicológicos y espirituales presentes en el momento de la prueba. Los valores elevados pueden ser indicativos de conflictos emocionales y psicológicos experimentados en el entorno familiar inmediato del bebé. Por lo tanto, las acciones terapéuticas deben dirigirse a equilibrar las emociones y los procesos psicológicos del bebé, respetando sus límites y evitando cualquier intervención farmacológica oportunista.
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